Buenos días, su casa le saluda / La casa del futuro ha llegado

Un día cualquiera se levanta y el software de su casa adapta la temperatura, activa la cafetera y se encarga de desconectarse él solo, cuando la cerradura electrónica indica que se ha ido. A la vuelta: las luces se encienden, se desbloquean los sistemas de seguridad, la televisión se activa y en la pantalla aparecen las llamadas y correos que tiene pendientes. Así es como le recibe su casa inteligente. Los electrodomésticos multifunciones, programables, las ventanas automáticas y las fundas para guardar la infinidad de mandos que atesoramos en todas las casas han pasado a formar del pasado, ahora sólo nosotros somos nuestro propio límite.

Las casas inteligentes llegan a otro nivel en el que todos podemos sentirnos cómodos. El diseño, la domótica y la tecnología se funden en un nuevo concepto creado para el disfrute de los habitantes que nos facilita la vida a golpe de click.

Según explican desde la empresa ibicenca Estudio Áureo “controlar tu casa a través de tu teléfono móvil está al alcance de todos los bolsillos y se ha convertido en una realidad cada vez más necesaria”. Esta empresa, creada por dos ibicencos, es una de las primeras que nacen en la isla con la intención de facilitar a cualquiera el acceso y disfrute de las nuevas tecnologías. Esto se debe a que la técnica ha colonizado hasta la parcela más pequeña de nuestras vidas y según remarcan los ingenieros “tenemos tantos dispositivos electrónicos que nunca llegamos a explorar todas sus posibilidades y a veces nos sorprenderían”. Ahora cualquier amante de los gadgets puede disfrutar de estas ventajas gracias a los sencillos programas elaborados por los expertos en domótica. Tener un proyector en casa, televisión por internet, electrodomésticos inteligentes o con wifi, sistemas de seguridad totalmente integrados y mucho más puede ser una realidad hecha la medida de cada familia.
La domótica ya no es algo destinado a grandes proyectos y entra pisando muy fuerte en el campo del ahorro energético o la seguridad en todos los niveles.

Ahora nuestra casa puede velar por nosotros incluso cuando dormimos o estamos de viaje. Pero también puede facilitar la vida de personas con movilidad reducida. Y es que, como explica Joan Albert Cardona, responsable de esta área en Estudio Áureo “la gente relaciona la domótica con subir y bajar ventanas pero es mucho más, se puede aplicar a cualquier necesidad” a lo que añade que “la tecnología está tan metida en nuestras vidas que a veces se nos puede hacer cuesta arriba por eso es importante contar con un buen servicio técnico, que nos acompañe durante todo el proceso y sobre todo, que no nos abandone una vez finalizado”. Los nuevos profesionales del confort en el hogar buscan la forma de mejorar nuestra calidad de vida mucho más allá de la comodidad de un sofá.
Crear escenas de luz, que van variando según nuestro estado de ánimo y la ocasión es una realidad que es cada vez más apreciada entre el público en general. A través de la iluminación se pueden transmitir sensaciones, dar vida a un espacio o a un negocio.

El diseño en iluminación es la diferencia entre un lugar que nos transmite algo inexplicable y un lugar que no recordaremos. Una cena romántica, una tarde de home cinema o simplemente una oficina son lugares que tienen necesidades lumínicas muy diferentes y según explica Jesús Lojo, responsable del departamento de Iluminación de Estudio Áureo, “si exploramos todas las posibilidades que nos brinda la luz, nos daremos cuenta de que marca la diferencia en todas las situaciones anteriores”. Pero tampoco hay que menospreciar su papel fundamental en temas de seguridad y es que, como recalca Lojo “no es sólo una cuestión estética, la luz nos expone para bien y para mal solo hay que aprender a utilizarla de forma a que nos beneficie”.


Pero la clave de este tipo de avances es conseguir aunarlas todas para que su control sea casi un juego de niños. Todas las opciones de nuestra casa pueden caber en  la palma de nuestra mano e incluso viajar a donde nosotros queramos en nuestro bolsillo. Las posibilidades están todas sobre la mesa, los imposibles pasaron de moda y los límites hace tiempo que dependen de nuestra imaginación.